Papá pródigo

Un miembro de una pandilla callejera, luego de escuchar la parábola del hijo pródigo, comentó: «Me identifico con esa historia; pero en mi caso, quien se fue primero de casa no fue el hijo, sino el papá.» El profeta lo miró con afecto y le invitó: «Quiero presentarte a este otro Papá tuyo, que nunca será demandado por paternidad irresponsable.»

La esquina del profeta

La esquina del profeta
Creo en el Espíritu Santo... que habló por los profetas